Grupo Matarromera y la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades han suscrito un convenio de colaboración para impulsar la contratación de los colectivos más desfavorecidos, en especial los perceptores de la Renta Garantizada de Ciudadanía. Matarromera se suma así al proyecto de la Red de Protección a las familias, impulsado por la Junta de Castilla y León para dar una respuesta integral a las familias más afectadas por la crisis económica.
Con esta firma, se abre un cauce de comunicación y coordinación entre la Administración Autonómica y el grupo de empresas vitivinícolas a la hora de contratar a personal. Matarromera se compromete a acudir a la Red de manera preferente en el caso de necesitar incorporar nuevos empleados a su compañía, siempre y cuando los perfiles de los posibles empleados encajen en sus necesidades. La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, por su parte, será el cauce de interlocución entre Matarromera y la Red de Protección para facilitar el contacto entre empleador y demandante de empleo. Ambas partes intercambiarán información, respetando la protección de datos, así como propuestas y medidas de actuación.
La apuesta por la responsabilidad social corporativa
La consejera ha afirmado que ejemplos como el de Matarromera permiten visibilizar que la apuesta por prácticas de responsabilidad social corporativa “no está reñida con el éxito empresarial, al contrario”. Para ello, se ha apoyado en una encuesta de la Fundación Randstad que señala que el 34 % de las empresas opina que con la contratación de personas de difícil empleabilidad se obtiene personal altamente motivado, lo que redunda en mayor rentabilidad y competitividad de la empresa. “El beneficio es, por tanto, para todos”, ha añadido.
Por su parte, Carlos Moro ha afirmado que el compromiso de Matarromera con la calidad y la excelencia no solo se transmite a través de los vinos, también que lo hace a través de todos los eslabones que componen la Responsabilidad Social Corporativa de la Empresa, y que vincula a todas las dimensiones de la actividad: la económica, la humana, la social y la medioambiental.Desde su fundación en 1988, Matarromeracolabora con instituciones, empresas y colectivos con el objetivo de prestar apoyos de la más diversa índole que permitan cumplir proyectos y expectativas de orden social. La empresa desarrolla diferentes proyectos y actividades que ayudan a la consecución de esos fines, como la colaboración con diferentes organismos e instituciones y la creación, gestión, promoción e impulso de ofertas o iniciativas que contribuyan al desarrollo y mejora cultural, social, económica, industrial y tecnológica, según ha explicado Carlos Moro.