Este viernes fue el Día Mundial del Medio Ambiente, una efeméride que en Bodegas Familiares Matarromera hemos celebrado siempre. En nuestra compañía, la sostenibilidad es una actitud, una filosofía, una forma de vida que se recoge en un documento con medidas tangibles: Matarromera Sostenible en Planeta Tierra. Dicho programa se apoya en dos líneas: Por un lado, la sostenibilidad, el medio ambiente y la lucha contra el cambio climático; y por otro, el desarrollo de productos más naturales, saludables y ecológicos.

El proceso de llevar a la práctica esta filosofía ha sido progresivo y desde el primer día. De hecho, cuando nuestro presidente, Carlos Moro, crea Bodega Matarromera, la primera bodega, construye un edificio semienterrado a la manera tradicional, cubierto de tierra por los lados y en su parte posterior. De esta forma, la temperatura se mantiene estable en su interior sin apenas necesidad de consumo energético. Pero esto sólo es un pequeño ejemplo. Esta preocupación por la sostenilidad la llevamos a su máxima expresión una década más tarde, cuando se diseñamos y construimos la bodega y el Centro de Interpretación Vitivinícola Emina. Cuando ya teníamos este proyecto en marcha, Bodega Emina Ribera, fue cuando se decidió dar un paso más allá y crear el plan Matarromera Sostenible en el Planeta Tierra, espina dorsal del crecimiento de la propia compañía. En él se contempla la concepción arquitectónica de todas las bodegas, la ecoeficiencia y sostenibilidad de los centros de trabajo, el aprovechamiento de los recursos naturales, la disminución de la dependencia energética mediante el empleo de las energías renovables, la reducción de las emisiones de CO2… De hecho, Matarromera es la primera empresa española con certificación AENOR que mide su huella de carbono.

Todas estas actuaciones nos han valido, además, varios reconocimientos como el Premio Europeo de Medio Ambiente. Pero este tipo de acciones las llevamos a cabo por convicción y principios y, también, por competitividad empresarial. Porque creemos y debemos y porque estamos convencidos de que el futuro pasa por comprometerse con el planeta TIERRA.