El reconocimiento, concedido por la Diputación Provincial de Valladolid, destaca la decisiva contribución de Carlos Moro como embajador de la provincia, impulsor del sector vitivinícola y defensor del entorno

 

Carlos Moro, fundador y presidente entre otras de Bodega Matarromera, ha recibido esta mañana el título de Alcaide de Honor 2021 del Museo Provincial del Vino en un acto celebrado en el propio Castillo de Peñafiel en el que se ha homenajeado también a la periodista Marta Robles y al empresario teatral Enrique Cornejo.

 

Conrado Íscar, presidente de la Diputación de Valladolid, acompañado del alcalde de Peñafiel, Roberto Díez, ha hecho entrega de las medallas y los diplomas acreditativos de la distinción honorífica y ha señalado que “Este nombramiento compromete a los Alcaides a convertirse en embajadores del enoturismo de la provincia de Valladolid. Hoy el enoturismo de calidad es el principal recurso turístico de nuestra provincia, y especialmente de la zona de la Milla de Oro de Valladolid, gracias a la calidad de nuestros vinos”.

Carlos Moro recogió el legado de una familia de viticultores con varios siglos de tradición elaborando vino en la provincia de Valladolid.  Para el bodeguero “Este reconocimiento tiene un enorme valor emocional ya que procede de mis paisanos y amigos. Nuestro objetivo durante todos estos años ha sido elaborar los mejores vinos en todo el mundo y que éstos fueran los mejores embajadores de esta tierra única que con tanto esmero tratamos de proteger y conservar”. Recientemente uno de sus vinos, Matarromera Crianza, ha sido reconocido como uno de los mejores vinos del mundo por la prestigiosa revista Wine Spectator.

En el acto de nombramiento de Alcaides de Honor, se ha reconocido el gran trabajo de los tres Alcaides por impulsar la tradición vitivinícola de la región y las bondades de una provincia que cada vez es más valorada a nivel nacional e internacional por su gastronomía y patrimonio.

El acto ha finalizado con la entrega de una botella de vino personalizada que cada Alcaide ha colocado en el botellero de honor del Museo. Un símbolo de apoyo a la región y de compromiso con la tierra.

Desde el año 2002 la Diputación de Valladolid ha distinguido con el título Alcaides del Museo del Vino a personalidades vinculadas con Valladolid, en representación a la enología, la cultura, el deporte, el arte o la empresa. Entre otros, destacan personajes de la talla de Alejandro Fernández, Carlos Falcó, Vicente del Bosque, Ferrán Adriá, Alejandro Blanco, Andoni Aduriz o Luis del Olmo.

 

 

2021, un año de reconocimientos

 

Carlos Moro comenzó el año recibiendo el galardón al Mérito Enoturístico concedido por la Asociación Española de Ciudades del Vino (ACEVIN) como reconocimiento a su carácter visionario, espíritu emprendedor y su firme apuesta por el turismo del vino, impulsando el departamento de enoturismo en las bodegas y ayudando a la creación de las Rutas del Vino.

A este importante premio se unía hace sólo unos días una noticia destacada y es que Matarromera Crianza acaba de obtener la distinción de ser elegido entre los 100 mejores vinos del Mundo según el último ranking de la prestigiosa revista americana Wine Spectator.  Se trataba, además, del único vino elaborado en la Denominación de Origen Ribera del Duero presente en el listado.

 

Carlos Moro, pasión por su tierra

 

Desde que fundó Matarromera en 1988 Carlos Moro siempre tuvo claro desde el principio que quería con ella cumplir varios objetivos. Por un lado, elaborar vinos que conquistaran los paladares de todo el mundo, del que su tierra se sintiera orgullosa y representada en todos los lugares. Por otro lado, contribuir decisivamente a difundir la cultura del vino y los valores de Valladolid, y para ello apostó desde el comienzo porque todas las bodegas fueran visitables y estuvieran preparadas para recibir cada año a miles de visitantes nacionales e internacionales. De hecho, ha fundado 9 bodegas y creado más de 100 vinos en 6 Denominaciones de Origen españolas y en Chile. Por último, el presidente de Bodegas Familiares Matarromera sintió la responsabilidad de preservar un entorno privilegiado y único. Fue fruto de este compromiso por lo que apostó decididamente por edificaciones sostenibles e integradas en el paisaje, por prácticas respetuosas con el medio ambiente y por generar instalaciones ecoeficientes con el uso de energías limpias que contribuyan a proteger el planeta.